Luego de dos largos años Dios ha permitido volvernos a encontrar presencialmente, del 04 al 10 de setiembre 2022 en la jornada de Hijas de la Caridad hasta los 15 años de vocación, una tradición muy bonita en nuestra Provincia, tiempo de gracia para fortalecer nuestra formación espiritual, humana y disfrutar la alegría de la fraternidad.
A la luz del Documento Inter Asambleas, la Jornada estuvo animada por nuestra Visitadora Provincial y las hermanas del Equipo de Formación; 26 hermanas, hemos sido congregadas de nuestro Perú. Fueron días muy emotivos de reflexión, encuentro y un espacio para escucharnos unas a otras.
Por la mañana y tarde hemos tenido temas muy interesantes para nuestro ser de Hijas de la Caridad y por la noche junto a la familia vicentina tuvimos la bendición de participar en la XXXV Semana de Estudios Vicentinos, con el Lema: La Sinodalidad y la Misión compartida al servicio de la Iglesia” en el Centro de Animación vicentina.
Sor Rosmery Moreno Vera, nuestra Visitadora nos motivó a ser Verdaderas Discípulas de Cristo y siempre preguntarnos; ¿qué haría Jesús en mi lugar? Nos instó a ser veraces con nosotras mismas, la jornada es para reflexionar y sobre todo tener en cuenta que “la hora de Dios es hoy¸ nos recordó lo que conlleva el seguimiento, llevar la cruz cada día, asumiendo la vida con todo lo que venga: alegrías, tristezas, dificultades, desafíos, etc. Ser consecuentes yendo a lo esencial y para esto renunciar a todo por Dios y de la mano de Jesús y María caminar juntas.
Tuvimos la gracia de poder visitar a nuestras queridas hermanas mayores de la enfermería, quienes nos acogieron con alegría y calor fraterno, sabemos que ellas nos fortalecen con sus oraciones y les agradecemos porque ellas son las que forjaron caminos por los que ahora nosotras damos pasos.
Agradecemos a Dios por este tiempo de gracia, a nuestra provincia que siempre está atenta a velar por nosotras sobre todo la preocupación por seguir afianzando nuestra vocación.
Nuestra gratitud sincera a nuestras hermanas de la casa provincial que con amor y detalles nos acogieron y a todas las personas que oraron por nosotras durante este tiempo de jornada.
Sus hermanas hasta los 15 años de vocación.
